Hoy escribo para ti

Hoy escribo porque tengo el alma rebosante de emociones,
plagada de deseos, remecida por tu ausencia
y aún más escandalisada por tu recuerdo.

Porque en la bulla de mis venas palpitantes,
se escucha el eco de tu nombre,
de tu nombre enmarcado, decorado con verde turquesa,
y unas hojas que hacen de fondo,
para que creas que estamos ahí,
ahí donde soñamos alguna vez estar...

Hoy escribo aunque miento
porque no escribo,
sino que TE escribo a quince minutos paso lento,
a cinco con las manos en mis rodillas y
la mente encerrada en un bolsillo de mi chaqueta lila.

Hoy escribo de ti, para ti, y ya no tengo un sentido claro,

de pensarte las ideas se me resbalan,

se me alborotan, se ponen a jugar sobre mis dedos inquietos.

A la distancia y sin censuras mas que mi propia realidad,
eres tu cantando bien bajito y haciendo explotar
el mar contra las rocas que habitan dentro de mi pecho,

esas que tu conoces, esas de las cuales tanto te hable,
esas que no me caben duda que no recuerdas y que jamás te importaron.

Me alegra tanto saber que ya no estas y que yo si estoy,
que sigo en el mismo lugar de antes, pero con una verdad atorada en mi pecho, con lineas reales, con fragmentos de vida que hoy son inutiles intentos de la misma.

Saboreo en cada pagina, en cada palabra,

incluso con los ojos cerrado la lectura

que sin invocarla me lleva a ti, a tus sollozos clandestinos,

ahogados entre recursos, entre sueños, entre quehaceres

que arrebatan un pedazo de ti,

y me alejan de la calidez de tu piel

que por más que se despedaze,

se quiebre

y caiga a tierra

yo recolecto para adherirlas a ti.

Hoy escribo para ti,

para deshacer mi nombre y rehacerlo en tu frente...