Daños a terceros

Que pena embarga mi corazón de saber que no existe la felicidad absoluta, de saber que mientras dos sonrien, se miran, se besan,  existen otros dos que sufren, que evitan los recuerdos y se llenan de tareas, tareas que alivianen la mente cansada de bucear en recuerdos que no hay como resucitar.

Si de mi dependiera, la dicha que siento repartiría de a poquito por el mundo, una gota de amor es lo que hoy se necesita y con esto no hablo sólo del amor de pareja, sino toda la clase de amores.

Si pudiese evitar vuestros dolores no dudaría en hacerlo, pero no hay forma, así son las cosas, de cerca o de lejos hay dos personas mirando, de lejos o de cerca hay dos corazónes quebrados, intentando retornar sabiendo que no existe forma de lograrlo.

Y de cerca, bien de cerca tu respiro sigue sonando como una canción simple y bonita, como una melodía nueva y tan exótica, que raro como funcionamos los humanos, interesante es como en el camino que estamos caminando encontramos todas las armas que nos permiten conseguir el futuro que anhelamos.

Todo tiene su tiempo, este es nuestro tiempo.-